Perdidas en el sector manufacturero por casi 14 mil millones de pesos por escasez de gas en Nuevo León

En la víspera del anuncio realizado por las empresas automotrices; Kia, Volkswagen, General Motors, Mazda y Audi por los paros técnicos que realizarán ante la escasez de gas, CAINTRA Nuevo León señala que para los industriales del estado, la crisis energética ha tenido un impacto negativo con pérdidas que oscilan en los 13 mil 984 millones de pesos.
CAINTRA informa que se vive una crisis sin precedentes, en materia energética para la industria de Nuevo León.
Para los industriales de la entidad, la crisis energética que se ha enfrentado en los últimos días, ha tenido importantes consecuencias para la producción ingresos del sector.
Las afectaciones prosiguen, el panorama lucen aún más complicado que lo ya visto recientemente.
Si bien se anunció, que el servicio de energía eléctrica se restableció para los hogares, Mientras tanto la industria inicia su recuperación a partir de esta mañana del jueves.
CAINTRA explica que a esto se agrega que la situación empeoraría a una crisis sin precedentes, por la conjugación de dos importantes factores que se deben de monitorear.

  1. La escasez de gas natural, derivado de las alertas críticas que el Centro Nacional de Control de Gas Natural (CENEGAS) ha emitido para restringir el uso de este insumo en los usuarios de la zona norte.
  2. El riesgo latente de que existan nuevamente desbalances y cortes en el suministro de energía eléctrica para los próximos días. La región norte de CENACE realiza su mejor esfuerzo para sostener el suministro eléctrico industrial, nos mantenemos en comunicación constante para ello.

Las afectaciones en el sector energético no tienen punto de comparación, pues con 4 días sin gas o sin energía eléctrica, prácticamente cualquier proceso de producción industrial de manufactura se detiene.

Con ello, se acumulan al momento más de $13,984 millones de pesos en pérdidas de producción para la manufactura de Nuevo León. De no tomar acciones inmediatas, esta cifra continuará creciendo en los próximos días, con sus consecuencias a los ingresos y empleos de la población en general.

Lo anterior se conjuga con las enormes consecuencias por la interrupción de cadenas de valor de la manufactura, el paro en las órdenes de compra a las PYMES proveedoras del sector, así como un replanteamiento de los planes de inversión nacional y extranjera.

El reto que tenemos como país es de ampliar nuestras capacidades tanto de producción y almacenaje de gas natural en nuestro territorio (el cual resulta ser rico en subsuelo para ello), así como de resolver la carencia en la red de infraestructura en redes de transmisión eléctrica e incluir nuevas fuentes de generación como las energías renovables.

El llamado urgente a las autoridades es a implementar acciones de forma sensata y transparente en el menor tiempo posible, así como el desarrollo de una política energética clara, certera, robusta, confiable para la inversión y de trabajo conjunto entre la iniciativa privada y pública que aumente la capacidad de la infraestructura actual en el sector energético de México.